domingo, 21 de diciembre de 2008

Los elefantes nunca olvidan



Me desaparecí estas semanas por todo el trabajo que hay siempre a fin de semestre y, también, por mi viaje a Lima. En mi último día en EE.UU, fui a una exposición en Nueva York de la artista Sue Coe. Advierto que este post será triste, pero, en compensación, el siguiente será más animado.


Sue Coe es una artista londinense, cuyo trabajo siempre ha sido orientado políticamente. Por eso, gran parte de su actividad fue como ilustradora en revistas y periódicos, con el fin de llegar a más gente. Mientras que en los 80s se enfocó en cuestiones de racismo y género, en los 90s se dedicó a temas de derechos animales. Como ella misma lo dice, se dio cuenta que hay un paralelo entre la opresión a los humanos y la explotación a los animales. Ellos (las víctimas del poder) son siempre "los otros". Sue Coe apeló a sus recuerdos de niñez, en la que vivió cerca de un matadero de cerdos, para crear su primera serie animalista Porkopolis; otros trabajos suyos son Pit's Letter, sobre los perros abandonados; y Sheep of Fools, sobre las ovejas y la industria de la carne en general.


La exposición que fui a ver se llama Elephants We Must Never Forget (Los elefantes que nunca debemos olvidar). Es una colección de dibujos, pinturas y grabados sobre la tortura dada a los elefantes desde la caza por el marfil, pasando por la caza deportiva y terminando en los circos.




Los únicos depredadores de los elefantes son los seres humanos. Estos grandes animales que en libertad recorren millas y millas, al ser capturados, son forzados a vivir en espacios pequeños toda su vida y son torturados para "amaestrarlos". Son condenados a vivir una vida llena de sufrimiento y miedo. Y eso lo saben muy bien Jumbo, Tom Thumb, Alice, Mary, Topsy, y Osama Bin Laden e Indra, protagonistas reales de esta muestra. En la exposición, no solo se presentan los cuadros, sino también recortes de periódicos de la época y/o fotos sobre estos casos.


Jumbo fue un elefante capturado para el Zoológico de Londres a finales del s.XIX. Luego, fue vendido a un circo en Nueva York. En 1885, el camión en el que estaba junto con otro elefantito Tom Thumb chocó con un tren, muriendo los dos. El maldito cirquero vio en estas muertes una forma más de lucrar. Disecó a Jumbo y lo exhibía junto con otra elefante, proveniente también del zoo de Londres, Alice, a quien vestían de luto, haciéndola pasar como su "viuda". Ella moriría dos años después, junto con otros animales, en el incendio del circo en Bridgeport.





Mary fue una elefante que mató accidentalmente a su domador en Tennesse, en 1916. La gente exigió su ejecución. Mary fue ahorcada delante de 2500 personas (niños incluidos). Se "olvidaron" de sacarle las cadenas de las patas antes de colgarla, con lo que la cadena que la colgaba se rompió, cayendo Mary al suelo con su peso de 5 toneladas. Aún con las caderas rotas, la colgaron de nuevo.



Tal vez el caso de Topsy es el más indignante de todos. Yo ya sabía de este caso, pero me resistía a creerlo. Topsy fue la elefante que Thomas Alva Edison electrocutó en 1903 para demostrar que la corriente alterna era más peligrosa que la corriente continua. Topsy era una elefante de circo (o sea que ya había tenido una vida más que miserable) que ya había matado a tres domadores, por lo que fue la escogida para este experimento. Le hicieron comer zanahorias rellenas de cianuro antes, lo cual no hizo ningún efecto. 1500 personas pagaron para presenciar el espectáculo (¿cómo puede existir gente así?). Edison convenció a la ASPCA (American Society for the Prevention of Cruelty to Animals) de que este método era más humanitario que el ahorcamiento. Edison, además, filmó la ejecución.


Lamentablemente, todo este abuso sigue pasando. Este año nomás, dos elefantes Osama Bin Laden e Indra murieron físicamente (su espíritu ya muere desde que son cazados) en India y en México, respectivamente. Osama era un elefante que fue asesinado a tiros por los pobladores de Assam (un estado de la India que cada vez más destruye el hábitat de los elefantes salvajes) acusado de la muerte de varias personas. Indra, una elefante de 40 años, se escapó del Circo La Unión y fue atropellada por un camión.

Ver los cuadros, fotos y recortes no solo de estos casos sino de muchos otros más fue una experiencia dolorosa (obvio que a años luz del sufrimiento de todos estos animales). Pero, además, aun cuando yo ya sé de todo lo que es capaz el ser humano en cuanto al abuso a los animales, nunca dejo de sorprenderme de constatar que el peor lugar para ser un animal es este mundo. Ver las imágenes de los elefantes aterrorizados en los circos (¿sabían que la mayoría le tiene un miedo terrible al olor del alcohol, ya que los domadores son alcohólicos?), cazados por su marfil o por deporte, pero, sobre todo, ver las imágenes de los humanos complacidos ante estos actos deprime y agota a cualquiera con un mínimo de sensibilidad.



Sin embargo, así como hay seres humanos viles, también hay seres humanos que algo han hecho por ayudar a los elefantes. En Tennessee, hay un santuario de elefantes rescatados, y como buen refugio, no está abierto al público, dado que no hay nada más estresante para un animal silvestre que la exhibición. Hay otras organizaciones también que buscan la protección para los elefantes. Esta misma exposición, de alguna manera, habrá podido sensibilizar a más gente sobre lo que atraviesan estos animales y, a ver si al fin, se prohiben los circos con animales, y se persiga eficientemente el tráfico de marfil y la caza de elefantes.

Aun cuando no sé nada de arte, y dejando de lado el hecho de que este tema me toca mucho, el trabajo de Sue Coe me pareció alucinante (en la galería, también había files con reproducciones de obras anteriores). Tanto las pinturas a color como los dibujos a blanco y negro cumplen su cometido: hacernos sentir desgarradoramente una conexión con los animales y, en mi caso, apreciar el hecho de que el arte puede expresar de manera tan visceral la opresión que sufren todos los animales.


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pd1. El título de este blog altera el de la exposición, dado que me pareció más apropiado enfocarlo desde la perspectiva de los elefantes mismos. Entren aquí para que vean algunas pinturas más, y los títulos de las imágenes que he colocado en este post.
pd2. Este martes 23 a las 5pm, frente a la Iglesia San José, en Jesús María, UPA y Adea estarán difundiendo el vegetarianismo, a propósito de la Navidad, la peor época para los pavos y cerdos.
Si son veggies, vayan pe!

8 comentarios:

Anónimo dijo...

tede.. que triste tu post!!!!.. bueno, por algo dicen eso que "tienes memoria de elefante".

Anónimo dijo...

¿Cómo puede haber gente así? Hijos de puta. Ellos merecen el infierno.

Gracias por toda esta información, Teresa.

Anónimo dijo...

En verdad, el ser humano es la ùnica bestia de la creaciòn. te falto agregar que, aparte de humillarlos en el circo, los siguen matando por el marfil. sinceramente muy bueno tu post. saludos.

Anónimo dijo...

Hola. espero que hayas pasado un buen inicio del año. Estoy en mi casa de playa pero veo que no has actualizado tu blog. recuerda que prometiste que tu pròximo post iba a ser alegre. lo estamos esperando.

Anónimo dijo...

Yo también estoy esperando tu post alegre, t. Yo estoy en pleno alumbramiento del mío.

Un beso,

Neto

Paul HxC dijo...

Ya px Tere, otro post!

Anónimo dijo...

Teresota ya me puse triste. Cuánto dolor y sufrimiento le causamos a los animales.. es un escándalo realmente. Cómo puede existir tanta gente que goza o lucra con ese sufrimiento.

Anónimo dijo...

wen post ¡

lamentablente aqui en peru
las galerias de arte o cualquier sitio donde se pueda publicar obras de este tema no son bien recibidas o te dicen te llamamos o simplemente se niegan....pues ya me ha pasado varias veces asi que mejor me quedo en la mejor galeria del mundo...LA CALLE :)